CONÓCEME
Quién soy
Me llamo Leire y como vosotras y vosotros, tenía curiosidad por el mundo de la bolsa. Empecé haciendo mis operaciones y probando todo tipo de estrategias y lo logré.. conseguir pagar mi hipoteca con lo que gané en la bolsa.
Ahora quiero poder compartir mis conocimientos. Cuando empecé eché en falta poder hablar con alguien sobre las estrategias, solo encontraba conferencias con mucha gente o libros con los que no podía contrastar mis opiniones.
Por eso quiero ofrecer mi experiencia, cada uno lleva un método al que hay que ser fiel… pero consultando una segunda opinión siempre. Aquí me tenéis para cualquier consulta.
ORÍGENES
Mis inicios en el mercado financiero
Una vez, al principio de mi carrera comercial, me habría desplomado sobre mi teclado, preguntándome: «¿Qué demonios estoy haciendo mal?». Vi que mi cuenta de operaciones perdía dinero a espuertas. Y no era dinero lo que podía permitirme perder. Vivía de esa cuenta. Saqué el pago de la hipoteca, la factura de la luz, la matrícula universitaria de mi hija y los pagos con tarjeta de crédito. ¡Nunca he visto caer un saldo de cuenta tan rápido! Un día vendí todas mis acciones (no me llevó mucho tiempo, había perdido mucho capital) y pasé un par de semanas deambulando en un estado de miseria. Cuando finalmente terminé de sentir pena de mí misma, me enfadé. ¿Quién se creía este mercado que era, quitándome todo mi dinero? Una palabra me fastidiaba: conocimiento. No sabía lo suficiente. En algunos trabajos puedes fingir con unas pocas agallas y mucho encanto, pero en el trading intradía no puedes hacerlo. No puedes pasear por esta arena agitada sin conocimiento. El mercado se come a los operadores ignorantes para desayunar. Lo sé. Yo fui una de ellos. Cometí un millón de errores. Sufrí pérdidas tan sombrías que mis amigos y familiares me rogaron que renunciara. Pero vengo de un «largo linaje de tercos». Persistí.
Aprendizaje continuo
Leí libros sobre análisis técnico que no entendía. Vi la CNBC hasta que me hirvieron los ojos. Entonces, un día, un amigo me presentó a una pareja excelente que eran verdaderos operadores. Me invitaron a su casa, me mostraron la configuración de su ordenador y me explicaron cómo operaban. Un nuevo mundo se abrió para mí. Me di cuenta de que el trading intradía era mucho más difícil e implicado de lo que había pensado. Me metí de lleno, me apunté a clases de técnicas de trading y de estrategia, y estudié como una loca. Seis meses después, cuando mis amigos ajenos al negocio me preguntaban cómo iban mis operaciones, apretaba los dientes y respondía desafiante: «Estoy perdiendo menos». Ellos ponían los ojos en blanco. Después de un tiempo, alcancé cierto equilibrio.
Luego llegó el día, casi un año después de que comenzara, en que comencé a ganar dinero, de manera constante. No grandes cantidades, pero sí el suficiente como para tener una vida digna. Cuando el éxito se convirtió en rutina, se me ocurrió que podía ayudar a otros a hacer lo que hago. Me imaginaba que debía de haber muchas personas a las que les gustaría trabajar en sus hogares, ser sus propios jefes, establecer sus propios horarios y obtener unas buenas ganancias cada semana.
¿Por qué deberían estos traders principiantes cometer los mismos errores que cometí yo?
Cuando comencé a operar, deseaba leer un libro que me hablara en términos claros y directos que pudiera captar rápida y fácilmente. Quería tener un apoyo que me dijera «cuando el mercado esté haciendo esto, no operes» o «cuando una acción esté haciendo esto, adelante».
Cuando mis pérdidas finalmente se convirtieron en victorias consistentes, decidí hacer esta web.
En las siguientes páginas, voy a hablar contigo como un buen amigo habla con otro. Si decides que el trading es para ti, te explicaré cómo hacerlo sin perder la camisa. Te diré lo más importante antes de que hagas tu primera operación, no después. Te mostraré cómo preservar tu capital y ganar dinero.
Desearía que alguien me hubiera explicado estas cosas desde el principio, de una manera que pudiera entender. Me habría ahorrado mucho dinero.
Así que aquí está, compañero operador o compañera operadora, lo que puedo ofrecerte.